Moréh Jonathan Colina
Shalom, como seres humanos siempre hemos recibido una formación desde niños y en base a la creencia que hemos adoptado, sin embargo, es muy común hoy día ver a personas incurriendo siempre en la misma pregunta, ¿a cuál religión perteneces?
Pero es evidente que que el Eterno desde un principio de la creación no estableció una religión. Entonces ¿qué tan cierto estarán aquellas personas que se han encargado de formarnos?, ¿será en una religión, o en lo que el Eterno ha establecido en su voluntad expresada en letras?
Es muy claro ver que los seguidores del Mesías jamás hablaron de una religión, pues ellos estaban claro que le servían al único Elohim verdadero, y en base a ello encontraron esa libertad plena que otorga el padre.
Juan 8:31-32
Dijo entonces Iehoshúa a los judíos que habían creído en él: Si vosotros permaneciereis en mi palabra, seréis verdaderamente mis discípulos; y conoceréis la verdad, y la verdad os hará libres.
Lamentablemente en nuestro tiempo, los conceptos se han invertidos, siempre se habla de religión, pero Adonaí a través del mesías no vino a implantar una religión, vino a continuar cumpliendo con el plan o proyecto celestial de nuestro padre.
Todas las religiones fueron creadas por hombres que interpretan la escritura a su criterio. Es una concepción que tienen de Adonaí.
Hay una sola forma de interpretar la biblia pero las personas no se han dado la tarea de buscarla, se han conformado con las religiones y el sistema de credo saturado del mundo grecoromano.
La escritura establece una cultura, manera de comportarse, alimentarse, vivir y otros. La teología bíblica es muy diferente a la teología religiosa. De allí que las las iglesias han caído en ese lazo religioso, sumergido en creencias extrañas a la fe bíblica y a los conceptos emitidos originalmente. Entonces vemos que se han vuelto puras predicaciones simplistas, donde lo trivial siempre prevalece.
Por otro lado, emitiendo conceptos y enseñanzas ajenas al mensaje original del Mesías, puesto que el vino a mostrar un reino, la iglesia se ha encargado de mostrar una religión, en base a sus pensamientos y posturas teológicas que ahogan la palabra y la hace infructuosa.
Los discípulos le preguntaron al mesías, ¿Cuándo restauraras el reino de Israel? (Hechos 1:6). Tengamos claro que es un reino, y no una religión, para darnos cuenta la diferencia de ser hijos y no religiosos. La palabra declara que todos los que le recibieron y creyeron en su nombre, le dios potestad de ser llamados HIJOS, no religiosos (Juan 1:12).
La religión es la atadura opresora que coloca un HOMBRE sobre otro para arrastrarlo en base a sus conceptos y pensamientos, ignorando los celestiales, para esclavizarlo totalmente.
El Eterno no es religioso, ni creo una religión, pues Él no esclaviza ni ata a nadie, al contrario le da completa libertad.
Mateo 11:28-30
Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os haré descansar. Llevad mi yugo sobre vosotros, y aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón; y hallaréis descanso para vuestras almas; porque mi yugo es fácil, y ligera mi carga.
El mismo Mesías nos advirtió que nadie nos engañe a pesar de que muchos vienen en su nombre, pero también nos dejó instrucciones para identificar a éstos falsos ministros del Mesías, que enseñan a invalidar el mandamiento de Adonai para establecer su propia tradición
Ha sido una lástima que los creyentes se hayan hecho esclavo de conceptos errados por religiones, más por la ignorancia que por la fuerza, y por mucho tiempo el mundo cristiano ha estado inmerso en divisiones y sectarismos religiosos, que no fueron aprobados por Adonai, aunque los permitió porque Él otorgó un libre albedrío al ser humano, y aun cuando se han cometido una serie de errores en la historia de la fe, causando más y más religiones.
Las iglesias históricamente han jugado con la ingenuidad del ser humano, tratando de ganar el favor del Señor, pero con conceptos extraños a los principios celestiales , arremetiendo contra los conceptos originales que son hebreos y desechando a Israel, pero colocándose bajo las enseñanzas de roma, Grecia y babilonia.
Como hijos del Señor, nuestro deber es buscar la verdad y seguirla, no jugando a ser creyentes y guiados por hombres, sino por Adonai y su gran reino.
Debemos desechar la religiosidad que ha actuado pasivamente a escondidas haciéndonos tanto daño, al alejarnos del Eterno y su Torah. No vivamos como religiosos, sino como verdaderos hijos y embajadores del reino.
Como hijos del Señor, nuestro deber es buscar la verdad y seguirla, no jugando a ser creyentes y guiados por hombres, sino por Adonai y su gran reino.
Debemos desechar la religiosidad que ha actuado pasivamente a escondidas haciéndonos tanto daño, al alejarnos del Eterno y su Torah. No vivamos como religiosos, sino como verdaderos hijos y embajadores del reino.
RECUERDA LA ORACIÓN DEL AVINU (PADRE NUESTRO), DONDE EL MISMO MESÍAS DICE: ¡VENGA A NOSOTROS TU REINO!... @Jonathanor7
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