lunes, 25 de noviembre de 2019

¿Cuáles eran los 5 maridos de la Samaritana?



Ministerio Restauración
LOS CINCO (5) MARIDOS
Moréh Gustavo Rivas Berti

Leer y estudiar la Biblia es indispensable, pero interpretar apropiadamente es vital para no alterar el mensaje; para ello es necesario conocer que significa cierta palabra en su cultura y no fuera de ella, las palabras solo tienen valor en su propia cultura, esto es lo que sucede en un caso que deseo exponer y como se altera su mensaje.

Juan 4:17-18 dice: “Respondió la mujer y dijo: No tengo marido. Iehoshúa le dijo: Bien has dicho: No tengo marido; porque cinco maridos has tenido, y el que ahora tienes no es tu marido; esto has dicho con verdad”.

Al Estudiar este caso, se asume que la mujer ha tenido cinco (5) esposos, pero cuando evaluamos el entorno donde vivió, nos damos cuenta que es imposible.

Entonces, ¿por qué aparece la palabra marido?

La palabra para esposo en hebreo es Ish (varón) como fue creado en Génesis, pero en hebreo existen otras palabras que poseen un doble significado como es el caso de la palabra Baal.

Baal, significa Señor, Marido, compañero o dueño; pero también dios o ídolo relacionado con el paganismo.

Cuando la mujer le habla al Mesías y le dice que no tiene marido; sin embargo, para el Mesías el tema a tratar va mas allá que una relación matrimonial, Él está tratando lo referente al servicio a Adonai, ella entiende y lo llama profeta, y le habla del servicio en ese monte.

Por ello, luego el Mesías dice: “créeme, que la hora viene cuando ni en este monte ni en Jerusalén adoraréis al Padre. Vosotros adoráis lo que no sabéis; nosotros adoramos lo que sabemos; porque la salvación viene de los judíos”.

Observe algunos detalles: OMRI compró a Semer el monte (1ª Rey 16.24) y trasladó allí la capital que estaba en TIRSA. Aunque Omri empezó a edificar la ciudad, la construcción se terminó durante el reinado de su hijo Acab.

La casa del rey la construyeron en la zona más alta, y cerca de ella, Acab edificó para su esposa Jezabel un templo dedicado a Baal.

Sargón rey de Asiria llevó cautivos a 27.290 israelitas y repobló la ciudad con gente de otros países que había conquistado.

Samaria se convirtió entonces en el centro administrativo de una provincia del Imperio Asirio.

Según 1ª Rey 16:31-32 hicieron un altar a los dioses y entro el politeísmo; ya que los judíos fueron expatriados según 2ª Rey 17:24. Para reemplazar a los israelitas en los poblados de Samaria, el rey de Asiria trajo gente de Babilonia, Cuta, Ava, Jamat y Sefarvayin con sus 5 dioses. Éstos tomaron posesión de Samaria y habitaron en sus poblados, trayendo progresivamente sus ídolos y dioses.

Otras potencias extranjeras se apoderaron de la región: los caldeos, los persas, los macedonios, los ptolomeos y los seleúcidas, hasta El año 332 a.C., cuando Alejandro Magno penetró en Israel, el gobernador persa Sanbalat traicionó al rey Darío y obtuvo del Macedonio autorización para construir un templo sobre el Garizim, autorización que obtuvo de inmediato y puso en lugar de ellos a siro-macedonios.

¿Por qué aparece 5 maridos?; Porque se confundió la expresión Baal, sin darse cuenta que el Mesías estaba hablando de la idolatría y de su servicio pagano como resultado de perder su identidad y ser asimilados.

¿Cuáles eran estos 5 maridos?; Los ídolos que trajeron cada una de los habitantes que llegaron, y Samaria vivió toda la furia de la guerra contra la idolatría que declararon Elías y Eliseo y la cual Jehú consumó cuando exterminó la casa de Acab (2ª Reyes 10).

Pasado el tiempo, se da este evento con la Samaritana y el Mesías le dice: “y el que ahora tienes”, ¿quién es ese? es el nuevo marido (ídolo) que ahora tenía bajo imperio romano.

Así que, el tema a tratar con la Samaritana es que sin darse cuenta hace tiempo perdieron su cultura y se apartaron del único Elohim verdadero, para seguir los dioses (baales) de otros.

La confusión se presenta al no entender la palabra Baal, que se traduce como dios o ídolo y colocaron marido.

Tiempos de Restauración de todas las cosas... (Hechos 3:21)

Shalom y bendiciones

viernes, 22 de noviembre de 2019

Parashá Jaié Sará: El valor de la vida, el valor de los días




Parashá Jaié Sará (Vida de Sará)
Parashá 05 del Sefer Bereshit (Génesis)
Parashá 05 de la Torah
Por Moréh Jonathan Colina

«El alimento del cielo que nutre nuestro Neshamá»

Torah: Génesis 23:1-25:18
Haftara: 1Reyes 1:1-31
Ketuvim: Lucas 9:57-62

 

Esta semana estaremos estudiando la Parashá Jaié Sará, el cual traduce como la vida de Sará. 


Esta porción comienza de la siguiente manera: 

Génesis 23:1-2 Y vivió Sará ciento veintisiete años. Tantos fueron los años de la vida de Sara. Y murió Sara en Quiriat-Arba, que es Hebrón, en tierra de Canaán, y acudió Abraham para hacer duelo por Sará y llorar por ella. 

Cuando nosotros leemos este texto originalmente en la Torah dice: *La vida de Sará fue cien años, veinte años y siete años; los años de la vida de Sará.* 

Y es bastante curiosa la forma de redacción, puesto que en las versiones vemos ciento veintisiete años. Pero, ¿a qué se debe esto? 

De acuerdo a un manuscrito del texto de Rashí la idea original dice que Sará a la edad de cien años era tan pura en su espiritualidad y moral como a la edad de los siete años. Quiere decir que ella vivió las tres etapas de su vida sin contradicciones y en perfecta armonía. 

De allí que aunque esta Parashá se llame la vida de Sará, es curioso que lo que habla es de su muerte y posterior entierro. 

Quiere decir que lo más importante en la Torah no es cuando nacimos, sino la forma como vivimos y sobre todo la condición en la que morimos. 

De allí la importancia de vivir y no simplemente existir. Por eso Sará decidió vivir sus días y no simplemente estar en este mundo por estar. Al punto que recalca que *tantos fueron sus años*, pero es curioso que existieran personas antes que ellas que incluso vivieron más años que ella. 

La idea que nos quiere plantear la Torah, es que la cantidad de años vividos no se refiere a la edad en sí, si no a la calidad de tiempo vivido. 

Se puede tener muchos años de vida, pero no necesariamente eso indica que vivamos la vida como la vivió Sará. 

Porque de hecho, se puede ser más joven y vivir la vida mejor que la de una persona envejecida que solo existió en su vida. 

El Talmud también dice que todos los años de Sará fueron iguales en términos de bondad a pesar que Sará sufrió 90 años de esterilidad y fue secuestrada dos veces. 

El significado de esto es que ella no se enfocó en lo que sucedió, Sará vivió cada momento como una oportunidad para aprender, para crecer, para mejorar y cumplir su propósito. Y aunque no veía el cumplimiento de lo que había sido declarado proféticamente sobre ella y su familia, de igual manera se aferró al Eterno más allá de sus fallas y momentos de incredulidad y supo esperar. 

Pero esa espera no fue un motivo para estancarse o quedarse paralizada, al contrario sigo luchando hasta el final, hasta no ver cumplida la promesa. 

Para ella el tiempo fue un gran regalo que aprovechó a máximo, ella entendió que el tiempo es el recurso más valioso que podemos tener y que no debemos malgastarlo, al contrario, usarlo en función de nuestra espiritualidad. 

Por eso el salmista expresa como un pedido hacia el Eterno que le enseñe a contar los días. 

Salmos 90:12: Enséñanos de tal modo a contar nuestros días, que traigamos al corazón sabiduría. 

Y contar los días no es alegrarnos por los años que llevamos, no es contarlo de forma numérica, contar los días tiene que ver con sumar o agregar lo espiritual a nuestra vida, con centrarnos en cada segundo vivido en añadir recursos celestiales que repercutan para un propósito eterno. 

El modo como llevamos cada día reflejará el nivel de sabiduría que poseemos o por el contrario, el nivel de necedad e insensatez. 

Efesios 5:15-17: Mirad, pues, con diligencia cómo andéis, no como necios sino como sabios, aprovechando bien el tiempo, porque los días son malos. Por tanto, no seáis insensatos, sino entendidos de cuál sea la voluntad del Señor. 

Para ello es necesario ser diligentes y saber que el tiempo perdido no lo podemos recuperar, que lo que dejamos de hacer hoy nos puede costar en nuestro desarrollo espiritual. 

Colosenses 4:5 Andad sabiamente para con los de afuera, no malgastando el tiempo. 

Malgastar el tiempo es emplearlo en cosas que no repercuten en nada, que no trascienden hacia una elevación espiritual. 

Por eso los sabios dicen *que matar el tiempo es un suicidio espiritual*, porque al no aprovechar el tiempo en función de nuestra espiritualidad, estamos suicidando nuestra vida espiritual, al parecer vivos para este sistema y muertos en el Eterno y eso no lo podemos negociar. 

Cada segundo, cada minuto, cada hora, cada día y cada año es sumamente valioso. Cuando aprovechamos cada día en función de nuestra elevación espiritual, le estamos sumando valor a nuestra vida. El hecho de no valorar los días, estamos demostrando que nuestra vida no tiene valor. 

No podemos permitir que los días se nos vayan haciendo mucho por todos y nada por nosotros. Porque a la verdad este sistema pasara, pero lo que si va a trascender es lo que nosotros hicimos cada día en función de agregar a nuestra espiritualidad. 

Eso lo entendió tanto Avraham, que al igual que Sará decidieron con cada día vivido trascender y dejar una huella para cada generación y para le eternidad. 

Génesis 25:7-8 Y estos fueron los días que vivió Abraham: ciento setenta y cinco años. Y exhaló el espíritu, y murió Abraham en buena vejez, anciano y lleno de años, y fue unido a su pueblo. 
Llenos de años, llenos de días, quiere decir que no hubo ningún momento en la cual este gran patriarca haya malgastado el tiempo porque fueron días en plenitud: aprendió a sumar, aprendió a vivir, aprendió a valorar y cumplió su encomienda. 

Esta Parashá nos enseña a poder valorar nuestra vida y el tiempo que el Eteno nos da, porque ye después de muerto no podremos hacer nada, pero cuando entendemos el significado de aprovechar bien los días, entonces sabremos que la muerte simplemente es un dormir con la esperanza de despertar por la promesa de resurrección que reposa en aquellos que viven en El y aprovechan los días en el Eterno, en su Torah y en el cumplimiento de nuestro propósito en este mundo 

Por lo tanto, debemos trabajar para que nuestra vida deje huellas imborrables, donde esto se traduzca en un testimonio, inclusive más allá de nuestra muerte. 

No es cuando nacemos lo importante, sino como vivimos y en que condición lo hacemos, de allí el valor de la vida y los días. 

Shabat Shalom 


Parashá Vaierá: En tu peor dolor aparece el Creador



Parashá Vaierá(Y apareció)
Parashá 04 del Sefer Bereshit (Génesis)
Parashá 04 de la Torah
Por Moréh Jonathan Colina

«El alimento del cielo que nutre nuestro Neshamá»
Torah: Génesis 18:1-22:24
Haftara: 2 Reyes 4:1-23
Ketuvim: Santiago 2:14-24


Esta semana estaremos estudiando la Parashá Vaierá, el cual traduce como: “y apareció”. Esta porción tan enriquecedora comienza de la siguiente manera: 

Génesis 18:1-8 Después le apareció Adonai en el encinar de Mamre, estando él sentado a la puerta de su tienda en el calor del día. Y alzó sus ojos y miró, y he aquí tres varones que estaban junto a él; y cuando los vio, salió corriendo de la puerta de su tienda a recibirlos, y se postró en tierra, y dijo: Señor, si ahora he hallado gracia en tus ojos, te ruego que no pases de tu siervo. Que se traiga ahora un poco de agua, y lavad vuestros pies; y recostaos debajo de un árbol, y traeré un bocado de pan, y sustentad vuestro corazón, y después pasaréis; pues por eso habéis pasado cerca de vuestro siervo. Y ellos dijeron: Haz así como has dicho. Entonces Abraham fue de prisa a la tienda a Sara, y le dijo: Toma pronto tres medidas de flor de harina, y amasa y haz panes cocidos debajo del rescoldo. Y corrió Abraham a las vacas, y tomó un becerro tierno y bueno, y lo dio al criado, y éste se dio prisa a prepararlo. Tomó también mantequilla y leche, y el becerro que había preparado, y lo puso delante de ellos; y él se estuvo con ellos debajo del árbol, y comieron.

Lo primero que vemos aquí es que Adonai se la apareció en el encinar de Mamre y Mamre era uno de los tres aliados de Avraham cuando lucharon contra los cuatro reyes de la tierra. Los otros dos eran Aner y Escol (Génesis 14:24), el cual nos enseña el Midrash que a estas tres personas fue que Avraham les pidió el consejo sobre la circuncisión. 

Aner le dijo que la circuncisión lo debilitaría y lo volvería vulnerable al ataque de los parientes de los cuatro reyes a los que recientemente había vencido. 

Escol enfatizó que la operación misma, pudiera generarle mucha pérdida de sangre y eso presentaba un riesgo de vida para él. 

Sin embargo, Mamre le dijo a Avraham que habiendo experimentado tantas victorias, incluyendo la milagrosa victoria sobre los cuatro poderosos reyes, él debía confiar en Hashem y seguir su orden. Por este consejo, Mamre fue recompensado por Elohim apareciéndose a Avraham en su propiedad: “en las planicies (encinar) de Mamre”. 

De aquí también vemos que todo consejo en función del desarrollo espiritual y que aporta en la obediencia de cada persona, siempre será recompensado por los cielos. 

Por el contrario, todo consejo que sirva para apartar a las personas del camino espiritual, también tiene una recompensa nefasta. 

Otra de las cosas que es importante resaltar, que según los comentaristas, este día en el cual Avraham estaba sentado en su tienda al pleno calor del día, ya era el tercer día luego de haberse hecho la circuncisión y no solo eso, sino que era el día de mayor dolor. 

Por lo tanto, las condiciones que está experimentando Avraham, para nada son fáciles, recién recuperándose de una circuncisión, atravesando un dolor, sentado en su casa en pleno calor. Y en ese momento, se le aparece el Eterno y lo visita. 

De aquí aprendemos que el Eterno es experto en aparecer en los momentos más difíciles de nuestra vida. 

Aunque hay situaciones y dolores que quizás experimentamos y pudiéramos decir que el Eterno no está con nosotros, pero es falso, el Eterno siempre está con nosotros, solo que el dolor que estamos atravesando en cierto momento es necesario y quizás estamos tan hundidos en la situación que no vemos la mano gloriosa de nuestro ayudador. 

El dolor suele ser tan abrumador, que no discernimos las visitas de aquel que nos fortalece y que tiene sus ojos puestos en nosotros. 

Por el contrario, Avraham supo que quien había llegado no era cualquier persona, sino aquel todopoderoso que le daría solución a su condición. 

Y con esa aparición, las visitas de tres enviados del Eterno. El cual Avraham también supo que no eran cualquier persona, eran unos emisarios del Eterno, por eso inmediatamente que los vio salió corriendo a recibirlos y se postro delante de ellos. 

No solo eso, sino que de forma rápida y con prisa les ofreció agua y un gran banquete (exquisita comida), para luego terminar compartiendo con ellos. 

Ahora bien, ¿dónde quedo el dolor de Avraham?. Si lo vemos de manera esforzada y diligente en hacer las cosas. 

Simplemente el aplicó lo que los rabinos enseñan, que de acuerdo al esfuerzo es la recompensa. Si bien Avraham sufrió intensamente por su circuncisión, trascendió ese dolor para poder cumplir con el mandamiento de la Hospitalidad el cual se conoce en hebreo como Hajnasat orjim (Recibir invitados) y sintió una gran alegría al hacerlo. Aprendemos que, cuanto mayor es el esfuerzo y la mesirut néfesh (el sacrificio personal) que requiere la mitzvá (mandamiento), más grande es la satisfacción que se siente al hacerla. 

Y esto es lo que aprendemos de nuestro patriarca, que cuando se trata de servir al Eterno, debemos olvidar nuestras angustias, nuestros desánimos, nuestras tristezas, nuestras preocupaciones y nuestros dolores. 

Si no la olvidamos, sino que seguimos sumergidos en cualquiera de esas situaciones, estamos diciendo que eso es más importante que el servicio al Eterno. 

Por eso, en este camino se trata de trascender más allá de lo que sentimos, para cumplir los requerimientos de aquel que nos llamó. 

Y eso también lo aprendemos de nuestro Rabí Iehoshúa, que aun yendo como oveja al matadero no abrió su boca y por los padecimientos vividos aprendió la obediencia. El no coloco su mirada en el dolor presente, sino en el gozo postrero y aunque le estaba doliendo, simplemente dijo: “que se haga tu voluntad y no la mía”. 

Tanto Iehoshúa como Avraham nos enseñan a poder sacrificar nuestras vidas en función del servicio al Eterno. 

Por eso, debemos estudiar Torah a pesar del cansancio, orar a pesar que no tengamos ganas, servir a pesar del desánimo, ir a la Kehila para congregarnos aunque nos quede lejos, dar actos de justicia a pesar de estar carentes de dinero y otras cosas más que son necesarias y que requieren esfuerzo. 

Por eso, cuando usted no quiera servir, estudiar, orar, congregarse, dar o hacer cualquier otra cosa que requiera esfuerzo, *ESE ES EL MEJOR MOMENTO PARA HACERLO*, eso impactara su alma, su ser, sus sentidos y causara un rompimiento de algo que lo mantenía atado. Y con ello también crecemos y nos desarrollamos espiritualmente. 

Es momento de salir de la situación crítica en la cual nos encontramos, para trascender y brillar. No debemos preocuparnos por las cosas que suceden alrededor, nuestra mayor preocupación debe ser por las cosas que nos suceden en nuestro interior y conectarnos con nuestro Padre que nos ama. 

A la final el dolor es temporal, pero el Creador es Eterno y hacia él debe estar direccionada nuestra vida y servicio. 

Por lo tanto, no te preocupes por el dolor, preocúpate por el servicio al Creador, porque siempre en tu peor dolor aparece el Creador

Shabat Shalom

Parashá Lej Lejá: Encontrarnos a nosotros mismos



Parashá Lej Lejá (Vete para ti)
Parashá 03 del Sefer Bereshit (Génesis)
Parashá 03 de la Torah
Por Moréh Jonathan Colina

«El alimento del cielo que nutre nuestro Neshamá»

Torah: Génesis 12:1-17:27
Haftara: Isaías 40:27-41:16
Ketuvim: Hebreos 7:1-9





Esta semana estaremos estudiando la tercera porción De Bereshit (Génesis), el cual es llamada Lej Lejá que traduce como Vete para ti. 

La porción semanal comienza de la siguiente manera: 

Génesis 12:1-4: Pero Adonai había dicho a Abram: Vete de tu tierra y de tu parentela, y de la casa de tu padre, a la tierra que te mostraré. Y haré de ti una nación grande, y te bendeciré, y engrandeceré tu nombre, y serás bendición. Bendeciré a los que te bendijeren, y a los que te maldijeren maldeciré; y serán benditas en ti todas las familias de la tierra. Y se fue Abram, como Adonai le dijo; y Lot fue con él. Y era Abram de edad de setenta y cinco años cuando salió de Harán. 

Lo primero que vemos aquí es que Adonai le hace un llamado Avraham y con ello la exigencia de salir de todo el mundo exterior que lo rodea. 

Esta exigencia a nuestro punto de vista puede evaluarse de forma inversa, porque Adonai le dice que debe salir de la tierra, de la parentela y de la casa de su padre, pero de forma natural esto es imposible, porque primero hay que salir de la casa de su padre, luego de su parentela y luego finalmente de la tierra. 

Con esto Adonai nos enseña que cada llamado que El hace no puede evaluarse o verse de forma natural, sino dentro del ámbito espiritual. 

Pero también al decirnos que lo primero que debe dejar es su tierra, nos muestra que al emprender un viaje hacia nuestro mundo interior es necesario primero cortar con la idolatría y el paganismo de nuestra tierra, que en este caso representaba Ur de los caldeos. 

Aparte de eso debía abandonar su parentela, que no solo expresa un lugar físico o geográfico, sino también la forma de pensar, hablar y actuar que era propia de ese lugar. 

Obviamente él tuvo que abandonar la cultura propia de su nacimiento y con ello también las ideas y creencias de su padre, que obviamente cada uno de ellas construye nuestro carácter y se expresa a través del comportamiento. Con todo eso también es necesario cortar, porque en el servicio al Eterno no podemos decir: “así soy yo, así me criaron mis padres”, porque el Eterno para utilizarnos necesita que cortemos con todo eso. 

Para cortar es necesario hacer un Lej Lejá, que es precisamente lo que el Eterno le pide a Avraham. Lej leja significa vete, quiere decir que el lugar donde él estaba no le iba a ayudar a cumplir el propósito y por eso el Eterno le dice que ya no esté allí, que se vaya al lugar donde Él le dijera. 

Los sabios enseñan que La expresión Lej significa: vete, anda, ve, sale, y la palabra Lejá quiere decir hacia ti, por lo que el Eterno le está diciendo vete hacia ti. 

Lej lejá también significa vete por ti, vete por ti mismo, vete por tu propio bien o bienestar, vete para ti. 

El Eterno le estaba haciendo una invitación a Avraham para encontrarse consigo mismo y la única manera de alcanzarlo es saliendo de su entorno familiar, de sus propias limitaciones, dejando de mirar su alrededor para entonces mirar muy dentro de él, para descubrirse, desarrollar y expandir todo el potencial espiritual. 

Para ello también es necesario negarnos a nosotros mismos, dejar a un lado ese YO egoísta (Ani) y convertirlo en NADA (Ain). Por eso el mismo Nuestro Rabí Iehoshúa nos enseñó lo siguiente: 

Mateo 16:24: Entonces Iehoshúa dijo a sus discípulos: Si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, y tome su cruz, y sígame.

Debemos anular nuestro yo, nuestro ego, para entonces hacer la voluntad del Eterno y lograr lo que dijo Pablo: Ya no vivo yo, mas vive el en mi (Gálatas 2:20). 

Para servir al Eterno es necesario morir, morir a nuestra perspectiva de la vida, a nuestros deseos y pasiones, a los que otros no han enseñado, a la manera como hemos venido llevando la vida, e inclusive a los que nuestros padres nos enseñaron con buena intención, pero si eso es opuesto a lo que el Eterno nos dice hay que dejarlo a un lado. 

Por eso hay ocasiones en la vida en las que el Eterno nos deja solos, nos aleja de todo y de todos, porque realmente quiere procesarnos y extraer la riqueza espiritual que internamente poseemos y que jamás será alcanzada si llevamos la vida de forma normal, rodeado de tantas personas y saturados de tantos compromisos con este sistema. 

De nada vale estar rodeado de personas y sentirnos sin el respaldo del cielo, o peor aún sentirnos acompañados de familiares y no cumpliendo con el llamado del Eterno. Es mejor estar solos, pero saber que Él está contigo y que lo que está haciendo en tu vida es de otro nivel, es más grande y más importante que estar rodeado de todo y de todos. 

Lo importante no es que estés rodeado de alguien, lo importante es que estés rodeado por El. 

Y Avraham contaba con ese respaldo, sabía que él no iba a estar solo, porque luego de dar el paso de salir entonces el Eterno lo ayudaría, por eso vemos que siempre estuvo con Él y a pesar de las pruebas le dijo que no temiera. 

Ese gran paso de Avraham, lo hizo no solo llamar el Padre de la fe, sino también el hebreo (porque cruzó o pasó de un lugar a otro) y aunque no sabía realmente hacia donde iría, igual dio el paso, sin dudar. 

Y aunque vemos que la tierra apenas se la iba a mostrar, él no se detuvo y avanzó, con ello el Eterno estaba probando era el compromiso de Avraham, pero también la fe en el Eterno. 

El resultado de la obediencia de Avraham, entonces traería como resultado que de el saliera una nación grande, que fuera bendecido, que su nombre fuese engrandecido para entonces ser de bendición. 

Esto quiere decir que jamás seremos de bendición completamente si no somos profundamente procesados, jamás seremos instrumentos del Eterno si no dejamos lo que nos rodea desde nuestro nacimiento. 

Por eso normalmente cuando el Eterno nos llama para cumplir un propósito, nos quita de todo y de todos en los cuales siempre estuvimos rodeados, nos saca de nuestra tierra de origen, nos aleja de la propia familia e inclusive nos hace cortar con muchas cosas que traíamos como estilo de vida. 

Y para muchos esto es cuestionable e inclusive hasta despiadado, pero el ser humano jamás comprenderá las exigencias del Eterno y por eso nunca harán cosas impresionantes porque seguimos pensando de manera natural, y esto no se trata de forma natural, sino espiritual, pero para el mundo las cosas espirituales son una locura. 

Y a la verdad eso es lo menos importante, porque mientras el Eterno nos ha trazado un camino de bendición, jamás seremos maldecidos por el hombre. De allí el Eterno le coloca un cerco de protección a Avraham, pero también a todos los que descendemos de Avraham. 

Todo ese camino comienza a desarrollarse desde el momento que Avraham decidió emprender ese viaje, porque de hecho dice el verso 4 que Avraham fue como Adonai le dijo. Quiere decir que no miro hacia atrás, no dudo, emprendió esa larga travesía de pruebas tras pruebas que lo harían elevar y alcanzar ese potencial, su yo verdadero. 

El problema fue que no corto completamente con su entorno familiar, con él se llevó a su sobrino Lot y hasta que no se separó de lot el Eterno no le sigue revelando y mostrando el sendero. 

Lo otro es, que luego de la salida lo primero que consigue Avraham fue una hambruna, esto nos enseña que desde el primer momento que decidimos emprender el viaje a nuestro yo verdadero, entonces el Eterno nos comienza a probar para medir la autenticidad de nuestro compromiso, si realmente estamos convencidos del paso que damos. 

Por lo tanto, la vida de Avraham es una tipología de la vida que nos toca vivir en este mundo, cuando somos llamados, cuando el Eterno nos procesa y nos prueba para cumplir una misión particular. 

Si no entendemos esto, siempre viviremos frustrados, preocupados, reclamando al Eterno pos las situaciones vividas, cuando realmente es la mejor muestra de su amor hacia nosotros. 

Todo este viaje comienza con un Lej Lejá, es necesario dejar para poder recibir. Y quizás, dejar duele, pero es una muestra fehaciente al Eterno que estamos comprometidos y que Él y su propósito es lo más importante. 

Cabe destacar que, en tiempos antiguos cuando un Maestro le daba una bendición a su discípulo le decía: “Que veas tu mundo en tu vida”. Y esto no es ajeno a lo que el Eterno le pidió a Avraham y nos pide a nosotros. 

El Eterno desea que alcancemos nuestro yo verdadero, que podamos ver nuestro mundo interior, que podamos conocernos a nosotros mismos. 

Para ello es necesario alejarnos de todo y de todos, porque en el momento que hacemos Lej Lejá, entonces dejamos de estar perdidos entre tantas personas, para conectarnos con nuestro Padre Eterno y verdaderamente encontrarnos a nosotros mismos

Shabat Shalom 




Parashá Noaj: Solo una persona justa hace la diferencia en este mundo


Parashá Noaj (Noe- Descanso, reposo) 
Parashá 02 del Sefer Bereshit (Génesis)
Parashá 02 de la Torah
Por Moréh Jonathan Colina

«El alimento del cielo que nutre nuestro Neshamá»

Torah: Génesis 6:9-11:32
Haftara: Isaías 54:1-10
Ketuvim: 1 Pedro 3:18-22



Esta semana estaremos estudiando la segunda porción de Bereshit (Génesis), el cual se conoce con el nombre de Noaj (Noé), puesto que es el protagonista de los sucesos narrados en estos capítulos. La porción comienza de la siguiente manera: 



Génesis 6:9-11: Estas son las generaciones de Noé: Noé, varón justo, era perfecto en sus generaciones; con Elohim caminó Noé. Y engendró Noé tres hijos: a Sem, a Cam y a Jafet. Y se corrompió la tierra delante de Elohim, y estaba la tierra llena de violencia.

Lo primero que vemos aquí es que su nombre hebreo es Noaj, el cual significa descanso, reposo. Esto nos viene también a mostrar que Noaj es un prototipo del Mashíaj, puesto que el mismo dice: 

Mateo 11:28: “Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os haré descansar”

El hecho de seguir su interpretación de la Torah nos brindaría descanso, por eso es importante que sigamos sus enseñanzas y no las de hombres saturados de religión y cargas que agobian y estancan. 

Jeremías 6:16:  Así dijo Adonai: Paraos en los caminos, y mirad, y preguntad por las sendas antiguas, cuál sea el buen camino, y andad por él, y hallaréis descanso para vuestra alma. Mas dijeron: No andaremos. 

Este camino de la Torah trazado por el Eterno y denominado como la senda antigua también nos brinda descanso, y por el hecho de caminar en él y ser el camino bueno, nos permite alinearnos al propósito del Eterno creado para nuestras vidas. 

El mismo Mashíaj se le conoce como la Torah viviente y de allí que al ir a él y asumir sus enseñanzas, entonces estamos asumiendo el mismo camino del que habla el profeta. Ser la Torah viviente se traduce en que en su estilo de vida diario no reflejaba otra cosa que no fuese la bendita instrucción dada en Sinaí (Torah). 

Eso da como resultado que su vida fuese justa y perfecta, al punto que para calificar como ese Mashíaj y justificarnos debía ser Tzadik Tamim (justo perfecto) y fue el mismo quien nos dijo que debíamos buscar el reino del Eterno y la justicia. 

Esa misma calificación es la que se la da a Noaj en su generación, era un hombre justo y perfecto (integro) y de allí que pudo calificar para una misión celestial y es precisamente construir el arca (Tevah) para ser resguardado tanto el cómo su familia y evitar morir en el diluvio (Mabul). 

Todo eso vino como resultado de caminar con Elohim. La expresión caminar en hebreo en ese contexto es Halaj que significa ir, andar, crecer, paso, recorrer, prosperar. Este término indica un estilo de vida. Y esa expresión es la raíz de halajá, que significa caminar, senda, la manera de caminar, la manera de modelar la propia vida. 

Quiere decir que cuando decidimos caminar, no solo estamos yendo en pos de Él al asumir su instrucción, sino que estamos creciendo paso a paso y prosperando en lo espiritual. Eso será un modelaje principalmente para nuestra familia y también para el mundo. Y esto fue lo que hizo Noaj. 

Génesis 7:1 Dijo luego Adonai a Noé: Entra tú y toda tu casa en el arca; porque a ti he visto justo delante de mí en esta generación. 

Noaj estaba en medio de una generación depravada y perversa, inmersa en idolatría, derramamiento de sangre, inmoralidad sexual y robos. 

Algunos comentaristas indican que Noaj era recto, pero sólo en comparación a las personas de su generación, personas que eran muy malas. Sin embargo, Noaj se elevó por encima de su entorno, una tarea nada fácil. No obstante, hablando objetivamente, no era completamente santo. Sólo era mucho mejor que el resto. 

Y precisamente esa es la tarea nuestra hoy día. Estamos viviendo tiempos proféticos, tiempos que también se conectan con los días de Noaj, sin embargo creo que peores que los días de Noaj, porque hoy día se suman otras condiciones espirituales de maldad y en mayor magnitud. 

Pero aun así, debemos sobreponernos por encima del sistema, ir en contra de la corriente. Y no se trata de ser perfecto para lograr esa misión, se trata de amar el perfeccionamiento espiritual y esforzarnos cada día por ser mejores, por caminar en justicia cuando obedecemos las instrucciones santas. 

Para ello es necesario ser íntegro y la integridad se mide cuando hacemos la voluntad del Eterno en el momento que nadie nos ve, cuando estamos a solas, cuando estamos en la adversidad o en medio del sistema. 

Esto nos enseña que ni la cultura, ni las costumbres, ni las personas que rodean, ni la sociedad pueden ser responsables de nuestra conducta, cada uno tiene una responsabilidad para vivir en justicia e integridad delante del Padre. 

Por ende, la perfección no expresa que dejemos de fallar, más bien cumplir el propósito del Eterno en nuestras vidas a pesar de la contrariedad que pueda existir. 

Es así cuando se destaca que Noaj era justo (Tzadik), pues un hombre justo es aquel que camina en obediencia a los principios del Eterno, eso es lo que te da justicia; el cumplimiento de la Torah en nuestras vidas, pero también dice que era un hombre perfecto (Tamim), al caminar en la dimensión del propósito que el Eterno ha establecido para nuestras vidas, de esta manera Noaj pudo alcanzarlo, el hecho de caminar con el Eterno, no fue cosa fácil pero se esforzó para hacerlo y lo logro, esto requirió aprender la disciplina del Eterno, hacer el deber no el querer del sistema contrario. 

Esta perfección la podemos alcanzar con el cumplimiento de los principios de la Torah, de allí lo que expresa el salmista: 

¡Cuán benditos son los perfectos de camino, los que andan en la Torah de Adonai! (Salmos 119:1) 

El perfeccionamiento dependerá de la obediencia al Eterno, que al fin del cabo es la Torah misma, pues es lo que surge de Él. 

Filipenses 2:15 para que seáis irreprensibles y sencillos, hijos de Elohim sin mancha en medio de una generación maligna y perversa, en medio de la cual resplandecéis como luminares en el mundo;

Así como Noaj en su generación, así como Iehoshúa en su generación, también debemos aprender a ser nosotros en la nuestra, porque al fin del cabo, nuestra tarea no está en ser influenciado por el mundo, sino más bien influir en él y eso solo puede lograrse cuando decidimos ser justo, porque a la verdad solo una persona justa hace la diferencia en este mundo.

Shabat Shalom 




Parashá Bereshit- Mashíaj: el propósito de la Creación




Parashá Bereshit(En el principio)
Parashá 01 del Sefer Bereshit (Genesis)
Parashá 01 de la Torah
Por Moréh Jonathan Colina

«El alimento del cielo que nutre nuestro Neshamá»

Torah: Génesis 1:1-6:8
Haftara: Isaías 42:5-21
Ketuvim: Juan 1:1-18

Damos gracias al Eterno que nos da la oportunidad de comenzar nuevamente el ciclo de estudio anual y en esta semana daremos inicio a la primera Parashá que tiene por nombre Bereshit (Génesis en las versiones bíblicas) y el cual normalmente se traduce como: en el principio. La porción de esta semana comienza de la siguiente manera: 

Génesis 1:1 En el principio creó Elohim los cielos y la tierra. 

Este texto a simple vista pareciera tan fácil de leer, sin embargo, recordemos que el hebreo es la lengua original de este mensaje sagrado y tal cual como se lee, no es la misma manera como se ve desde su fuente primaria. 

En el lenguaje hebraico aparece: "Bereshit bará Elohim et hashamáim veet haaretz". Y cuando leemos esto desde su contexto original nos da una impresionante y reveladora enseñanza. 

La expresión Bereshit está compuesta de Be y Reshit. Be en hebreo significa por, por causa de, por medio de, dentro de, en, con. Y Reshit significa primero (en lugar, tiempo, orden o rango), primicias, primer fruto, principio. La raíz de esta expresión es Rosh que significa cabeza, principal. 

Todas estas expresiones nos conectan con Mashíaj, ya que si unimos el significado de ambas palabras diríamos *que por causa del principal, de la cabeza, fue que el Creador hizo todo*, así como dice la escritura: 

Colosenses 1:15-18 Él es la imagen del Elohim invisible, el primogénito de toda creación. Porque en él fueron creadas todas las cosas, las que hay en los cielos y las que hay en la tierra, visibles e invisibles; sean tronos, sean dominios, sean principados, sean potestades; todo fue creado por medio de él y para él. Y él es antes de todas las cosas, y todas las cosas en él subsisten; y él es la cabeza del cuerpo que es la congregación, él que es el principio, el primogénito de entre los muertos, para que en todo tenga la preeminencia; 

Quiere decir que Mashíaj es el Reshit de todas las cosas, aparte de ser primogénito porque es el primero y unigénito porque es el único en su tipo, también es el primogénito y la primicia de la resurrección, como está escrito: 

1 Corintios 15:20 Mas ahora Mashíaj ha resucitado de los muertos; primicias de los que durmieron es hecho. 

1 Corintios 11:3 Pero quiero que sepáis que Mashíaj es la cabeza de todo varón, y el varón es la cabeza de la mujer, y Elohim la cabeza de Mashiaj.

Por lo tanto, ya desde el principio de la creación nos muestra el motivo y origen principal de todo y precisamente es Mashíaj. 

Es importante también resaltar que la primera palabra es Bereshit y que esta expresión comienza con la letra hebrea Bet que significa casa, enseñándonos que este planeta es una gran casa donde no solo habitaremos nosotros como sus hijos, sino que también la hizo para que Mashíaj reinara sobre ella, al punto que en su segunda manifestación todo lo creado en esta casa se tendrá que sujetarse a su autoridad. 

Otra de las cosas también importantes destacar es que cuando vemos en los originales hebreos, las primeras tres expresiones Bereshit Bara Elohim en su terminación nos muestra tres letras hebreas: Tav, Alef y Mem, las cuales son las mismas letras con la que se escribe la palabra Emet que significa verdad y nos conecta con la vida. 

Quiere decir que todo el Eterno lo hizo con verdad, verdad que representa su voluntad, sus pensamientos, su palabra (Davar) y que en las versiones aparece como el verbo. 

Juan 1:1 En el principio era el Verbo (Davar), y el Verbo (Davar) era con Elohim, y el Verbo (Davar) era Elohim. 

El Davar es la voluntad del Eterno, sus pensamientos, todo lo que estaba en su mente como plan, como diseño eterno y que obviamente era Elohim porque todo eso surge de Él. Dentro de ese plan estaba la idea de un Maljut (Reino) y también de un Mashíaj que será el Rey de ese reino. 

Ya el Eterno sabía lo que acontecería con los adámicos, porque El conoce presente pasado y futuro, y sus decisiones a Él no le tomó por sorpresa. No obstante, desde la creación ya el Eterno había establecido todo un plan para revertir la falla en Adam. 

Apocalipsis 13:8 Y la adoraron todos los moradores de la tierra cuyos nombres no estaban escritos en el libro de la vida del Cordero que fue inmolado desde el principio del mundo. 

1 Pedro 1:19-20 sino con la sangre preciosa de Mashíaj, como de un cordero sin mancha y sin contaminación, ya destinado desde antes de la fundación del mundo, pero manifestado en los postreros tiempos por amor de vosotros, 

Quiere decir que cuando ni siquiera había nacido Iehoshúa, ya en la mente del Eterno, el cordero (Mashíaj), había sido inmolado para redimir la condición en Adam. 

Por eso, cuando Iehoshúa estaba hablando de su rol como Mashíaj, él dijo que Avraham vio sus días y se gozó, cuando dice que vio sus días, es que Avraham tuvo revelación de los días del Mashíaj. 

Juan 8:58 Iehoshúa les dijo: De cierto, de cierto os digo: Antes que Abraham fuese, yo soy. 

¿Pero como es que vio sus días y él estaba antes que Avraham? Precisamente, él está hablando de sí mismo en su rol como Mashíaj, puesto que en la mente del Eterno ya el Mashíaj había sido creado antes que la misma existencia de Avraham. El mismo Juan hace una declaración muy similar: 

Juan 1:15: Juan testifica de Él, y ha clamado, diciendo: Éste es Aquél de quien yo decía: El que viene detrás de mí, es antes de mi, porque era primero que yo

Aunque Juan nace primero que Iehoshúa, el reconoce que la investidura y rol que tendría Iehoshúa como ese Mashíaj (ungido) ya había existido antes que el en la mente del Creador. De allí lo que dice el texto anterior 

Juan 1:14 Y el Verbo (Davar) se hizo carne, y tabernaculizó entre nosotros, y contemplamos su gloria (gloria como del Unigénito del Padre), lleno de gracia y de verdad. 

Quiere decir que el plan que tenía el Eterno en su mente como lo es el Mashíaj se ve materializado en su primera parte en la persona de Iehoshúa. 

Pero luego vendrá en su segundo rol como Mashíaj ben David (Rey). Por eso dice la escritura: 

Apocalipsis 22:12-13 He aquí yo vengo pronto, y mi galardón conmigo, para recompensar a cada uno según sea su obra. Yo soy el Alef y la Tav, el principio y el fin, el primero y el último

Aunque en las versiones aparece alfa y omega, lo correcto es Alef y Tav que son la primera y última letra de la lengua sagrada y santa: la hebrea. 

Y eso también la confirmamos con la frase: bará Elohim et hashamáim veet haaretz, esa expresión et se escribe con dos letras (Alef y Tav), las mismas dos letras con los cuales se identifica el Mashíaj. 

Así pues, vemos que entonces el Eterno es el creador de todo (Bore Olam) y aunque la evolución y las teorías han tratado de establecer méritos humanos, El es el único Elohim, la autoridad máxima, el dueño de todo lo que existe y por ende tiene la potestad de ser el Creador y rey. 

De allí que la expresión Bará (Creó) es una expresión hebrea que solo aplica al Eterno, porque es el único que puede traer a la existencia algo inexistente. El único que puede crear algo de la nada, solo con el poder de su palabra. Esa es la acción de un ser supremo, único y todopoderoso. 

Y obviamente todo lo creado fue con un propósito, creó la tierra y todo lo que hay, esta gran casa para morar en ella y desarrollar el máximo potencial espiritual, creó los cielos (7 cielos) con el propósito de ejercer autoridad sobre nosotros y nuestro deber es hacer que en la tierra se haga la voluntad que se manifiesta en los cielos, de allí la importancia de traer los cielos a la tierra y manifestar su gloria eterna en medio nuestro. 

Nos creó a nosotros con un propósito, creó al Shabat para mostrarnos semanalmente que hay un reino en el séptimo día profético que se manifestará y que debemos estar siempre atentos. 

Por lo tanto, todo lo creado por el Eterno lo hizo pensando en alguien, lo hizo con un motivo, como dice la escritura: 

Juan 1:3 Todas las cosas por Él fueron hechas, y sin Él, nada de lo que ha sido hecho fue hecho. 

Ese motivo es el Mashíaj y si Él es la cabeza y nosotros somos el cuerpo porque estamos representados en El, quiere decir que también el Eterno pensó en nosotros, pensó en esta gran casa (Bet) conformada por sus hijos donde también reinara el Eterno a través del Mashíaj. 

Shabat Shalom 


lunes, 18 de noviembre de 2019

¿Cual era el aguijón de Pablo?





Moréh Gustavo Rivas Berti

Cuando leemos la escritura conforme a nuestro criterio, podemos interpretar las cosas diferentes al autor, y esto nos aleja del mensaje y lo peor cambia el mensaje.

Por ende, estudiar bajo la perspectiva hebrea, será de bendición si usamos este recurso, como un medio para alimentar nuestro ser desde la raíz o fuente original.

Veamos un caso del cual se ha dicho tanto:

En 2ª Corintios 12:7 dice: “Y para que la grandeza de las revelaciones no me exaltase desmedidamente, me fue dado *un aguijón en mi carne*, un mensajero de Satanás que me abofetee, para que no me enaltezca sobremanera”.

Históricamente se ha enseñado que el aguijón de la carne que tenía Pablo era una enfermedad, hasta se ha explicado cuál es la enfermedad y se asume que era en la vista o en el estómago; sin embargo, lo que representa aguijón en hebreo, no refiere a lo que tradicionalmente se ha trasmitido.

La palabra aguijón en hebreo es *“Sakak”* y significa entretejer, hacer algo oculto, crear algo que puede ser irreal, como tergiversar un mensaje para dañar a otro.

Basado en este concepto, Pablo dice que se presentaron mensajeros de Satanás, hombres que estaban visitando los lugares donde Él llevaba el mensaje del evangelio para crear duda e inquietud; y en ocasiones desviando la verdad.

Eso, es lo que representa “el aguijón” que menciona Pablo en Colosenses 2:1: “Porque quiero que sepáis cuán gran lucha sostengo por vosotros, y por los que están en Laodicea, y por todos los que nunca han visto mi rostro”.

Las siguientes citas bíblicas demuestran que en hebreo aguijón son los mensajeros pero también su acción; como lo definimos previamente.

*1ª Corintios 9:2-3: “Si para otros no soy apóstol, para vosotros ciertamente lo soy; porque el sello de mi apostolado sois vosotros en el Señor. Contra los que me acusan, esta es mi defensa”.*

Estos, eran los problemas que presentaba Pablo, que se le cuestionaba su ministerio fuera de Israel, en las comunidades que visitaba, ya que los mensajeros informaban que Pablo estaba enseñando algo distinto a lo dicho por Moisés, los Profetas y el mismo Mesías.

*Hechos 21:21: “Pero se les ha informado en cuanto a ti, que enseñas a todos los judíos que están entre los gentiles a apostatar de Moisés, diciéndoles que no circunciden a sus hijos, ni observen las costumbres”.*

Ya hemos estudiado un poco la situación que vivía Pablo ahora analicemos citas Bíblicas, que enseñan que el aguijón eran los mensajeros y sus acciones contrarias.

*Números 33:55:* “Y si no echareis a los moradores del país de delante de vosotros, sucederá que los que dejareis de ellos serán por *aguijones* en vuestros ojos y por espinas en vuestros costados, y os afligirán sobre la tierra en que vosotros habitareis”.

Cuando leemos bien la cita el aguijón representa a los moradores de Canaán.

*Jueces 2:3:* “Por tanto, yo también digo: No los echaré de delante de vosotros, sino que serán *aguijones* para vuestros costados, y sus Adonai es os serán tropezadero”.
Se observa que los enemigos eran como aguijones.

*Ezequiel 28:24:* “Y nunca más será a la casa de Israel espina desgarradora, ni *aguijón* que le dé dolor, en medio de cuantos la rodean y la menosprecian; y sabrán que yo soy Adonai”.

*Josué 23:13*: “Sabed que Adonai vuestro Elohim no arrojará más a estas naciones delante de vosotros, sino que os serán por lazo, por tropiezo, por *aguijón* para vuestros costados y por espinas para vuestros ojos, hasta que perezcáis de esta buena tierra que Adonai vuestro Adonai os ha dado”.

Basado en estas citas, aunado a lo que representa la palabra aguijón (Sakák) en hebreo, se observa claramente que los mensajeros de Satanás y el aguijón eran todos aquellos que se levantaron contra el mensaje del Reino que enseñaba Pablo.

Él cuando los visitaba, mostraba el evangelio a todos aquellos que por la misericordia de Adonai estaban siendo alcanzados por esta noble labor y ser justificados a través del Mesías.

Nunca el aguijón según la Escritura es una enfermedad.

Shalom y bendiciones.